¿Por qué?

Exáctamente eso quisiera saber. Por qué la vida no es tan fácil veces suenan, como las canciones la cantan o como los consejos enseñan.

Muchas veces es fácil decir “no la llame mas”, “eso lo que tiene es que olvidarlo”, “no llore más por eso”, y así... pero definitivamente eso sucede cuando el corazón no está nada involucrado enlo que pasa. Estamos diciendo todo eso mirando los toros desde la barrera.

Ojala tuviéramos respuesta a todo lo que nos sucede y todo lo que no entendemos. Ojala la vida fuera como Quién quiere ser millonario, donde a la pregunta más dificl está un 50/50, la llamada a un amigo, el publico, y en ultimas, así uno pierda conoce la respuesta a esa pregunta. Pero no es así, la vida no tiene todas as respuestas que queremos, de lo contrario no habría sentido para vivir, no tendríamos emociones, nervios, tristezas, alegrías...

Es muy fácil decir “algún día todos moriremos”, y sí, es muy cierto, y pensar en eso me trae sentimiento en contra. Saber que no tendré preocupaciones, seré feliz por siempre y que estaré junto a Dios, no lo puedo cambiar por nada, pero también está de por medio la gente que amo, que me acompaña, los sueños, los deseos, todo lo que quiero aprovechar en esta vida. Ahora si que no es fácil decir eso que todos vamos a morir algún día, tal vez, sea un poco más fácil de vivirlo cuando sabemos que todas las cosas tienen un ciclo, el ciclo de la vida... pero no es así y menos cuando es un amigo/primo que está al lado nuestro, de sólo 21 años.

La única respuesta que encuentro al final de todo esto es tener la tranquilidad, satisfacción y certeza un día conocí a la persona que me ha dado todo lo que tengo, desde mi vida, mi techo, mi familia, esa persona que ha cumplido todos los deseos de mi corazón... ese Dios que incompresiblemente sabe todo y permite todo, no sé por qué lo hace, cómo decide, qué quiere hacer... y tratar de entenderlo sería perdido, aunque quisiera hacerlo.

Así como no entiendo por qué haya tanta tristeza, tampoco entiendo por qué algún día decidió creer en mi/nosotros, sabiendo todo lo que se venía... todos los errores, todas las decepciones, todas las incoherencias...

En últimas todo comienza en Él, sin ninguna respuesta y así mismo termina.

En memoria de Mauro.